miércoles, 29 de agosto de 2012

LA TRISTEZA DEL PAYASO



Y acá estoy...
Un bar, una botella y la soledad...
Está mal? No lo se...
Pero no se imaginan lo feo que es...
Teniendo mil lugares donde ir y estar bien,
al único que quiero ir no puedo...
En sí no es que algo me lo impida...
Es el propio rechazo que siento en mi lugar...
El saber que soy de ahí pero que ya no pertenezco produce sentimientos antagónicos de amor-odio...
Haberme convertido en un nomade que duerme donde se encuentra cuando tiene sueño y se inventa excusas para desaparecer de la realidad que ya lo agobia...
Volcándose en falsos sentimientos hacia mujeres poco conocidas...
Buscando ese amor que ya no posee...
Pero que está deseoso de brindar...
Y sigo acá...
Parte de la familia se debate entre la incertidumbre de una puta enfermedad y yo acá...
Me encantaría estar ahí... Pero no sale de mi...
Es el compromiso de familia, no el sentimiento de amor...
A veces pienso...
Y creo que podría jugarme más por mis amigos...
La familia que elegí, que por la de sangre...
Se que no es así...
Porque amo a mi familia...
A las dos...
Pero las circunstancias me condicionan y hasta me confunden...
Lastimarnos es moneda corriente en lo que sería mi hogar...
Por ende, el nómade hace lo propio y pasan días y días sin aparecer...
Y ahora en la soledad de un bar mi mente explotó...
Sólo quiere expresarse...
Hablar un poco de lo que miente y oculta siempre...
Llorar a carcajadas es difícil...
Y más aún la vida del payaso...
Que esperamos de un payaso?...
Que nos haga divertir y punto...
Nunca nos preguntamos sí el payaso se siente bien...
Sí quiere hacernos reír, o tiene q hacerlo...
Así me siento a veces...
Pero a nadie le importa...
Haberme enterado que luche años contra el amor de mi vida
pensando que sólo buscaba lastimarme y darme cuenta ahora que no es así...
Me duele...
Estoy tan vacío como el anden de una vía muerta...
Quiero hacer las cosas bien...
Y ya no se sí puedo...
Pero no importa porque a pesar de todo no caigo...
Sólo me doblo como un junco...
Ahora seguiré en este bar ahogando mi mente en este veneno que me hace olvidar...
Porque a veces es más fácil perderse por momentos a seguir luchando con lo que tanto lastima...

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